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CONTENIDO BÁSICO

¿QUÉ PODRÍAN HACER LAS PERSONAS A CARGO DEL ENTRENAMIENTO PARA PREVENIR Y TRATAR LAS PREOCUPACIONES SOBRE LA IMAGEN CORPORAL?

Algunas veces puede ser difícil desafiar los mensajes negativos que reciben las atletas sobre su cuerpo. Como persona que entrena deporte, quizá no te enteres de las preocupaciones que puedan surgir fuera del deporte, pero puedes intentar generar confianza y una comunicación abierta con tus atletas y animarlas a que acudan a ti para hablar de cualquier problema que tengan tanto dentro como fuera del terreno de juego.

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PREPÁRATE

  • Familiarízate con las causas y señales de las preocupaciones relacionadas con la imagen corporal y la alimentación.

  • Infórmate sobre tus propios prejuicios de género y cómo pueden influir en el entrenamiento.

  • Refuerza las medidas de cero tolerancia con respecto a comentarios sobre el cuerpo y a humillaciones sobre la apariencia.

  • Haz que tus atletas conozcan tu postura ante prácticas negativas sobre la imagen corporal al inicio de la temporada.

Crear un entorno seguro

  • Crea un espacio seguro antes, durante y después del entrenamiento dedicado a discutir el bienestar de las atletas y cualquier preocupación que puedan tener. Estos espacios deben ser: privados, voluntarios, confidenciales, informales y sin críticas.

  • Ofrece un equipo adecuado y que les quede bien.

  • Contrata personas con apariencias y capacidades diferentes.

  • Asegúrate de que haya vestidores privados.

  • Asegúrate de que las Instalaciones, los sitios web y las redes sociales incluyan representaciones visuales de diferentes tipos de cuerpos y apariencias.

  • Asegúrate de que las Instalaciones cumplan estándares de accesibilidad.

  • Permite y defiende el uso de uniformes diferentes para los entrenamientos y las competencias (p. ej., variedad en tallas de playeras y shorts).

  • Pregunta a las atletas con qué prendas se sienten cómodas cuando entrenan y ofréceles tantas opciones como sea posible.

  • Pide tallas y estilos adicionales de todos los uniformes y ofrece tallas de repuesto en caso de que las necesidades cambien durante toda la temporada.

  • Siempre que sea posible, permite que las atletas se prueben los uniformes en privado antes de decidir con qué tallas se sienten más cómodas.

  • Asigna al azar los números de los jerseys de los equipos, en lugar de hacerlo conforme a las tallas.

  • Elimina todos y cada una de las mediciones de peso en deportes que no sean de peso.

  • Elimina mediciones de peso en público o la publicación del peso en los deportes que requieran peso.

  • Apoya a tu atleta para que "mantenga peso" de una manera saludable y evita, siempre que sea posible, centrarte en el peso.

  • Considera otros indicadores de rendimiento y bienestar, más allá del peso y la apariencia.

SÉ UN MODELO CORPORAL POSITIVO A SEGUIR

  • No hagas comentarios sobre la apariencia de tus atletas, incluso los comentarios que parecen positivos sobre la apariencia pueden resultar dañinos para la salud y la autoestima.

  • No hagas comentarios sobre qué y cuánto comen tus atletas.

  • Evita hacer comentarios sobre tu propio cuerpo, tus hábitos alimenticios o de ejercicio.

  • No normalices las conversaciones sobre el cuerpo y la apariencia, mejor normaliza las conversaciones sobre la imagen corporal.

  • Concéntrate en las habilidades, el rendimiento y el bienestar de las atletas, más que en su apariencia.

  • Recuérdales que todos los tipos de cuerpos tienen un lugar en el deporte.

PROPORCIONA AYUDA

Estos son algunos consejos sobre lo que podrías hacer si detectas prácticas negativas relacionadas con la imagen corporal entre tus atletas:

  • Siempre que sea posible, habla con la atleta en privado.

  • Usa un lenguaje imparcial que muestre preocupación por su bienestar más que por su apariencia.

  • Presta atención a tus atletas y cree en lo que te digan: ellas saben mejor que nadie lo que su cuerpo necesita.

  • No intentes "arreglar" la situación, pero ofrece apoyo si hace falta. Pregunta a tu atleta qué tipo de apoyo necesita y cómo abordar mejor el problema.

  • Si el problema surgió debido a algo sobre lo que tienes el control, intenta solucionarlo.

  • Si el problema surgió debido a algo que está fuera de tu control, pregúntale qué apoyo puedes darle para evitar que se repita.

  • Después de la conversación, realiza un seguimiento para ver si necesita apoyo adicional.

  • Anima a tu atleta a que acuda a ti si tiene algún otro problema en el futuro.

  • Si sospechas que existe un problema grave, consulta a las madres o a los padres o a profesionales.

La clave para entrenar confianza corporal es ser capaz de reconocer y ayudar a prevenir y reducir las preocupaciones de los atletas sobre su imagen corporal.

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